Retomo los "malos de película" con el, seguramente, único papel de malo que hizo Charles Chaplin. Una parodia de la Alemania de Hitler, una sátira contra el fascismo y un alegato contra el horror de la guerra y el sometimiento a la dictadura.
La elección del personaje vino de la búsqueda de fotos de Charlot. Quería hacerla a modo de homenaje hacia una compañera de Magisterio, Rocio, que me recordó mi participación en un Charlot bien distinto, a todo color, en su papel más típico, con bombín y bastón... Y hace 30 años. No hay cómo tirar de los viejos recuerdos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario